Si usa un cepillo dental demasiado duro, y emplea un técnica errónea, puede dañar sus encías. Por esta razón, elija siempre un cepillo dental de textura media o suave, de cabezal estrecho en la punta, para acceder bien a la parte posterior de la boca. Un cepillo gastado no limpia igual que uno en buen estado, por eso es importante cambiar de cepillo dental en cuanto estén gastados los filamentos.
Establecer buenos hábitos de higiene bucal a una edad temprana es un primer paso hacia unos dientes sanos toda la vida.
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